Un benchmark es una comparativa de rendimiento pero en marketing digital es mucho más… También comprende una investigación, un análisis, una planificación, entre otras acciones clave que veremos a continuación.
Planificación: Se debe definir qué comparativa se hará y cómo se llevará adelante la planificación y recopilación de datos.
Análisis: Se analizan los datos desde las fuentes. Se toman decisiones en base a ese análisis.
Acción: En base a todos los resultados analizados, se debate qué cambiar y mejorar.
Evolución: Existen mejoras que no estaban contempladas al comienzo y luego se pueden dar.
Mucha relación existe entre un benchmark y un KPI. Por un lado, los primeros se lanzan para conocer el posicionamiento de una empresa sobre otras, toman información de fuentes externas. El KPI mide la evolución de ese proceso y toma las variables dentro de la empresa en sí.
Una de las herramientas digitales que se usan para bechmark es Tableau. Ya mencionamos en otro artículo que con ella puedes analizar muchos datos de manera eficiente.
Muchas herramientas son útiles dado que se pueden automatizar y personalizar en tiempo real. Quizás el trabajo que antes hacían un par de personas, ahora en minutos se logra, gracias a la tecnología.
Los benchmarks y el análisis de los datos es clave hoy en día para cualquier empresa. Las decisiones estratégicas son las que llevan el mando y solo así podemos tomarlas con confianza.
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