Los headings o etiquetas de encabezado, son los títulos y subtítulos que se colocan al crear contenido web en HTML. Es una forma de estructurar la información y facilitarle la lectura al usuario, pero también de hacerle saber a los robots de Google de qué trata tu página.
Tienen una jerarquía que va de H1 (título principal) a H2 (subtítulo de mayor peso), H3 (subtítulo de menor peso que H2) y así hasta llegar a H6. La importancia se refleja en el tamaño de cada uno.
En otras palabras, una buena estructura de headings mejora la experiencia del usuario (UX) al interactuar con tu contenido y también, si los usas estratégicamente, ayuda a Google a interpretar tu web y posicionarte mejor para las palabras clave que te interesan.
Si utilizas un CMS o gestor de contenido (como WordPress), colocar una etiqueta de encabezado a una frase es súper sencillo. Basta con que cambies el estilo del bloque de “párrafo” a “encabezado” y selecciones el nivel de heading que necesitas (H1, H2, H3, H4…)
Una recomendación clave al momento de usar headings en tu contenido es respetar la jerarquía. Si quieres que tu texto esté ordenado, no puedes empezar por un H3 y luego usar un H1. Se asume que el H1 es el título general de una página y que luego vas desglosándolo en subtítulos más específicos.
Por eso, utiliza un sólo H1 por página (es el tema principal y no quieres que los usuarios y Google se confundan) y luego varios H2 con los subtemas principales. A su vez, dentro de cada H2, si sigues profundizando, puedes colocar H3.
Otro tip importante es que priorices colocar las keywords principales en los headings ya que, de este modo, aumentas las posibilidades de posicionarte bien para ellas.
Si haces eso, ya tendrás una buena estructura de headings que ayudará a tu UX y a tu SEO.
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